Sucedió en Singapur:
Un militar, con mano de hierro, asumió el comando del país.
En seis meses, de cerca de 500 mil presos
quedaron, solamente 50.
Todos los otros (criminales confesos) fueron fusilados.
Todos los hombres públicos (políticos, policías, jueces,
magistrados, etc.) corruptos fueron fu-si-la-dos. (Existían
miles de pruebas contra ellos).
Todos los empresarios ladrones fueron fu-si-la-dos o
huyeron rápido del país.
La multitud de drogadictos que quedaban dormidos en las calles, huyeron
desesperados a Malasia, para librarse del fusilamiento o de los
trabajos forzados.
Un mensaje por radio y televisión avisaba que el país estaba con un
cáncer y que debía ser ex-tir-pa-do.
Si algún pariente suyo fue extirpado,
comprenda: él era un cáncer para la nación.
Después de haber limpiado el país, reorganizado el sistema político,
judicial y penal, este militar convocó a elecciones directas y se lanzó
de candidato a presidente.
Venció con el 100% de los votos !
Hoy, Singapur es uno de los países más seguros para vivir. Es uno de los
más desarrollados y es más seguro que los arrogantes Estados Unidos,
Inglaterra, o Israel.
Ya en el avión, la ficha de desembarque tiene un letrero que reza
"DEAD" (muerte) bien grande y en rojo, y la explicación de que
es la pena por posesión de drogas. Cualquier droga, cualquiera sea la
cantidad transportada, da lugar a que el sujeto al que se le detecte sea
fusilado o condenado a prisión perpetua con trabajos forzados.
Un surfista brasilero intentó entrar a Singapur con una plancha de surf
rellena de cocaína. Es obvio que deseó su propia muerte. La madre del
joven traficante apareció en la TV pidiendo a Lula que intercediera por
el hijo; no sirvió para nada. Ni la madre, ni Lula, ni las protestas evitaron
que la Ley se cumpliera.
En los hoteles, los "Guías de la Ciudad " tienen una página
explicando que la policía de Singapur garantiza la integridad física de
cualquier mujer, las 24 horas del día (ésto porque en la antigua
Singapur, sin ley y sin orden, las mujeres que salían solas eran violadas
y/o asesinadas).
(Los chicles están prohibidos en Singapur,
por el simple hecho que, tirados al piso ensucian las veredas).
Distribuir panfletos: sin chance. Sólo en tiendas y no deben ser
entregados a las personas: deberán estar colocados en góndolas o
soportes, y que los interesados los tomen a voluntad. Tirarlos al piso...
motivo de multa muy cara.
El año pasado, la secretaria local de un amigo, que hacía un trabajo
fuera de hora, al retornar a su casa fue seguida por un patrullero de la
policía. Cuando llegó y puso la direccional para entrar al
edificio, le indicaron que parase.
Uno de los policías se acercó entonces a la ventanilla del auto y le
dijo:
- "Sra., como Ud. sabe, estamos haciendo una campaña de civilidad en
el tránsito, multando a los infractores y premiando a los que manejan
correctamente. Y Ud. Sra., en todo el trayecto hasta aquí no cometió
ninguna infracción. FELICIDADES! Aquí está un cheque de 100 dólares
Singapurianos (equivalente a cerca de US$ 80) y le pediría que firme el
recibo, por favor..."
¿Te parece mano muy dura ? No. Los derechos
humanos reales son para los ciudadanos honestos y trabajadores, que
rigurosamente hacen sus aportes al estado, que viven en Paz, respetuosa y
solidariamente con sus pares.
POR DONDE EMPEZAMOS SEÑORES DE DERECHOS HUMANOS
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