lunes, 31 de diciembre de 2018

Mi 2018




El 2017 fue un año (todo el año) donde hubo ciertos cambios, en realidad, pensé que el mundo se me venía encima, con más problemas que soluciones, y no sé, quería un final de novela.

No sucedió… pero si cambió muchas cosas en mí.

En el 2018, decidí hacer cambios chiquitos, pero concisos, cambios que hacen feliz a mi corazón y serenidad.

No importa cuantos años tengas, siempre date la oportunidad de conocer nueva gente y crear nuevos círculos.

Lo que importa es que tomes la decisión para crear, transformar y moldear tu vida.

Recuerda siempre tus prioridades, nunca los abandones.

Les deseo un gran cierre de año y el más próspero 2019 que puedan imaginar.

Le llaman suerte, pero es constancia.
Le llaman casualidad, pero e disciplina.
Le llaman genética, pero es sacrificio.
Ellos hablan, tú entrena.

Les mando un gran abrazo

Su amiga:

Anagris